Cuando una patrulla del Puesto de Villafranca de Ordicia (Guipúzcoa), prestaba servicio de vigilancia entre los municipios de Villafranca y Beasain; poco después de las cuatro menos cuarto de la tarde del sabado 17 de enero de 1976, divisaron una bandera vasca (ikurriña), que pendia de un pequeño palo (mastil), a modo de guión (setenta por setenta centimetros), en lo alto de una loma situada sobre un túnel a la altura del kilómetro 422, de la carretera nacional I (Madrid a Irún).
Tras recorrer unos 70 metros que separaban la carretera del punto donde estaba situada dicha bandera, y después de retirar una bomba simulada, al proceder a recoger la enseña vasca, hizo explosión una carga de dinamita que estaba enterrada en el suelo y conectada a esta, que lanzo a unos 17 metros de distancia y produjo la muerte instantanea del guardia civil Manuel Vergara Jiménez, hijo y hermano de guardias civiles, natural de la localidad sevillana de Viso del Alcor, de 21 años de edad (el próximo dia 23 de enero habria cumplido 22 años).
Habia ingresado en el Cuerpo en febrero de 1974 y llevaba nueve meses destinado en el Puesto de Villafranca de Ordicia. Junto a él se encontraba el cabo jefe de patrulla, que por efectos de la explosión sufrió heridas de diversa consideración a consecuencia de las cuales hubo de ser hospitalizado.